Las lagunas de la planificación en comunicación

A veces es impredecible medir el éxito de nuestra gestión comunicativa. Por muy buena planificación y trabajo que se realicen, siempre aparecen imponderables que se escapan a nuestro control. Con eso contamos.

Pero, ¿qué ocurre cuándo en la planificación se nos pasa por alto algún detalle? La consecuencia más inmediata, generalmente, suele ser una pérdida de prestigio en nuestra reputación corporativa, ya que, habitualmente, los medios de comunicación son los primeros en enterarse, e incluso son los más afectados.

Eso le puede pasar a la ACB. El trabajo de su gabinete de comunicación, con el eficaz profesional Mario Hernando a la cabeza, va a verse cuestionado estos días por un ¿despiste? en la organización de la Supercopa de baloncesto, que empieza el próximo viernes en Málaga.

Los horarios iniciales de celebración de las semifinales estaban perfectamente diseñados para que los medios de comunicación pudieran hacer una buena cobertura, ajustándose a sus necesidades de cierre, en los soportes escritos. La ACB lo comunicó a los medios el miércoles 13 de spetimebre.

Sin embargo, lo que era bueno para los compañeros periodistas no lo eran tanto para la propia promoción del evento y de la propia liga ACB. A la hora en que se celebraba el Unicaja-DKV Joventut (18.00 horas), primera de las semifinales, las gradas del Martín Carperna era muy probable que estuvieran semivacías. No es una buena hora para los aficionados a la canasta que tengan que trabajar a esas horas.

La solución encontrada, por otra parte lógica, ha sido trasladar este partido a las 22.00 horas, toda vez que el otro enfrentamiento (TAU-Barcelona) va a ser retrasmitido por la 2 de TVE, y eso ya era más complicado de modificar.

¿Pero qué pasa con los medios, sobre todos con los impresos, pero también con el resto? Se podría dar el caso de que la primera semifinal se alargue (por una prórroga, por ejemplo), por lo que el inicio de la otra se atrasa. Al final, los periodistas pueden estar haciendo la rueda de prensa de la segunda semifinal a la una de la madrugada, como mínimo. Y ahí no sólo estarán los que tienen el agobio de la hora de cierre, también los audiovisuales, que tendrán que recoger declaraciones y hacer los montajes de imágenes.

Es una lástima, porque la labor del departamento que dirige Mario Hernando es excelente desde hace varios años, consiguiendo que las competiciones de baloncesto en España formen parte de la agenda de los medios, pese al canibalismo del fútbol.